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jueves, 28 de mayo de 2015

Buscaran responder incógnita sobre varamiento de ballenas Sei en el Golfo de Penas

Comenzando mayo nos sorprendió la noticia entregadapor el Servicio Nacional de Pesca, sobre el varamiento masivo de ballenas Sei (Blaenoptera borealis), en la parte norte del golfo de Penas. El hecho fue reportado por un grupo de científicos que se encontraban realizando un estudio en el lugar.


Hasta ahora no se ha podido dilucidar la causa de la muerte de estos ejemplares, por esta razón una expedición de científicos, profesionales y funcionarios de distintas instituciones vinculadas a la conservación  y el océano (Universidad de Chile, Universidad Austral, Instituto Antártico Chileno, WWF, Oceana, Centro de Conservación Cetácea, entre otros), zarpó el pasado lunes desde Puerto Montt en el buque PSG Ortiz de la Armada de Chile para encontrar respuestas ante este varamiento masivo.

En tanto el director regional de Sernapesca Aysén, Cristian Hudson, indicó que las autoridades están muy interesadas en los resultados sobre este misterio sin resolver. "Desde acá coordinamos la participación de otros servicios públicos que tienen competencia en este tipo de eventos como la brigada de delitos ambientales de la PDI y la propia Autoridad Marítima. Ahora queda esperar que los análisis arrojen los datos necesarios para determinar a ciencia cierta qué provocó el varamiento de estas ballenas".

Desde el año 2008 Chile extendió de forma indefinida la moratoria para la caza de estos cetáceos, además de nombrarlos como monumento natural.

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miércoles, 27 de mayo de 2015

El "juego de cartas" de la Evolución

Las especies sufren un proceso mediante el cual mutaciones de largo alcance barajan el genoma que hace que estas evolucionen y no es una acumulación de pequeñas mutaciones en las que cada una tiene un efecto pequeño la que produce la evolución.

Es un misterio por qué la evolución por selección natural no fue descubierta hasta el siglo XIX por Darwin, pues podría haber sido propuesta mucho antes. Sólo era necesario observar el entorno sin necesitar tecnología sofisticada y hacer la propuesta de que las especies cambian cuando una presión de selección escoge los individuos de mayor éxito reproductor en una población en la que herencia varía.



La evolución de la especies fue propuesta antes que Darwin por Lamark, pero en esta teoría no se usaba la selección natural, sino que los individuos cambiaban su herencia en función de lo que hacían.

El caso es que desde el siglo XIX la teoría de la evolución por selección natural ha permanecido prácticamente sin cambiar en sus mecanismos básicos. El problema siempre está en los detalles: ¿la evolución se da muy poco a poco o presenta saltos bruscos?, ¿por qué las especies permanecen estables en el tiempo pese a ir acumulando mutaciones?…

Ahora, un grupo de investigadores de la Universidad de Yale liderado por Jeffrey Townsend ha usado un nuevo modelo genético para dilucidar si las especies sufren un proceso de acumulación de pequeñas mutaciones en las que cada una tiene un efecto pequeño o si hay mutaciones de largo alcance que barajen el genoma.

El modelo lo han aplicado a distintas especies como levaduras, gusanos o moscas. Para el estudio se han centrado en la expresión de genes, que es considera como pieza clave en el cambio evolutivo. Según sus resultados el segundo caso de los expuestos antes explica mejor los procesos evolutivos que sufren las especies.

Cuando Darwin propuso su idea sobre la evolución no se sabía nada sobre los genes o el ADN, simplemente propuso la existencia de ciertos cambios que se producían en la herencia. Posteriormente se conjeturó que habría mutaciones en los genes que se conservaban en las poblaciones si de algún modo ayudaban al éxito reproductor. Pero, como el efecto de una mutación al azar puede tener consecuencias fatales para el organismo, había que proponer un mecanismo que permitiera la evolución sin eliminar la mayoría de los individuos.

La primera solución fue proponer que las mutaciones no tenían ningún efecto sobre la adaptación. Propuesta que ha sido rechazada por los experimentos en muchas ocasiones.

La segunda solución consistió en proponer que la mayoría de las mutaciones tenían un efecto pequeño y sólo la acumulación de varias mutaciones a lo largo de las generaciones podía crear nuevos rasgos en los individuos de la especie.

La tercera hipótesis propuso lo contrario. Las mutaciones no producían efectos pequeños, sino que disparaban una reacción en cadena de cambios. Es lo que se llamó house of cards en inglés por su analogía con barajar un mazo de naipes.

Pero distinguir entre estas dos últimas propuestas no ha sido fácil. Aunque el modelo favorito de “house of cards” fue propuesto hace décadas, sólo ahora se cuenta con la tecnología para recopilar los datos necesarios que la pongan a prueba.

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“House of cards” evolutivo

Defaunación del Antropoceno, en el umbral de la Sexta Extinción

Vivimos en medio de una ola global de pérdida de biodiversidad antropogénicamente impulsada: eliminación de poblaciones y especies, disminución critica en la abundancia de especies locales. En particular, los impactos humanos sobre la biodiversidad animal son una forma poco reconocida del cambio global ambiental. Entre los vertebrados terrestres, 322 especies se han extinguido desde 1500, y las poblaciones de las especies restantes muestran 25% de disminución del promedio en abundancia. Los patrones de declive en los invertebrados son igualmente graves: el 67% de las poblaciones controladas muestran una disminución del 45%. Estos descensos en las poblaciones animales, crearan un efecto de cascada en los ecosistemas y el bienestar humano. Mucho se desconoce acerca de este "Defaunación Antropoceno"; estas lagunas de conocimiento obstaculizan nuestra capacidad para predecir y limitar los impactos de la defaunación. Es evidente, sin embargo, que la defaunación es tanto un componente dominante de la sexta extinción en masa del planeta y también un importante motor de cambio ecológico global.” (Dirzo et al, 2014)


Este es el resumen con que se inicia el trabajo publicado por un grupo de científicos en la revista Science, en el que se señala que, los humanos podríamos estar viviendo “los primeros días de la sexta extinción masiva del planeta”, señala el estudio.

La última extinción masiva de la que se tiene registro en la Tierra fue la que hizo desaparecer del planeta a los dinosaurios, hace 65 millones de años.

A diferencia de ese evento, en esta oportunidad los científicos destacan el hecho de que somos los propios seres humanos los que estamos impulsando el fenómeno, lo que de alguna manera da luces de esperanza en cuanto a que el proceso de alguna manera podría ser revertido.

En el año 2004 otro estudio científico, el realizado por el Earth Policy Institute, ya había alertado de esta situación, la que definía como la más severa de los últimos 50 años y la que podría acabar con un 15% de las especies animales y un 37% de las plantas del planeta para el año 2050.

Enlace
Rodolfo Dirzo, Hillary S. Young, Mauro Galetti,  Gerardo Ceballos, Nick J. B. Isaac, Ben Collen  
Science 25 July 2014: Vol. 345 no. 6195 pp. 401-406
DOI: 10.1126/science.1251817



lunes, 25 de mayo de 2015

Chile definirá áreas prioritarias para la conservación del cóndor andino (Vultur gryphus)

Las amenazas que enfrenta esta especie en el país van desde las intoxicaciones hasta la pérdida de su hábitat.



En Perú, una de las principales amenazas para el cóndor es su captura para el festival del Yawar Fiesta (fiesta de sangre) que se celebra en varias localidades y durante todo el año en ese país. En la celebración, el cóndor es amarrado a un toro, quien intenta librarse a toda costa de sus ataques. Si el ave muere, el ritual se transforma en una tragedia, porque simboliza la llegada de calamidades a toda la comunidad.

Este problema no existe en Chile, sin embargo, hemos discutido que una de las principales amenazas que enfrenta la especie es el envenenamiento de carroñas, cacería y pérdida del hábitat. A pesar de esto existe un vacío de información al respecto, que debemos estudiar para cuantificar cuál es la amenaza real para la población en Chile”, explica el biólogo Víctor Escobar, quien participó en el Taller Regional para la Conservación de esta especie que se realizó este mes en Lima, Perú.

En la cumbre, que recibió a expertos de todos los países donde habita esta ave, se compartió información científica para diseñar un mapa con las áreas prioritarias de conservación, el que se dará a conocer este año.

¿Cuántos existen?

Escobar, quien asistió al encuentro en representación de la Corporación de Amigos del Cóndor, señala que actualizar este tipo de información, como la distribución y cantidad de ejemplares, podría permitir que la especie pase de la categoría mundial “cercana a la amenaza” a “amenazada”, al interior de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).

A nivel nacional, explica que la especie está en una condición vulnerable en la Zona Norte y Central y fuera de peligro en el sur, aunque allí hay amenazas latentes, como la muerte por plomo.

Escobar agrega que en Chile no se ha realizado ningún estudio que determine una cifra exacta de cóndores. Sólo se han elaborado censos parciales que dan cuenta de unos 300 ejemplares en la Zona Central.

La cumbre fue promovida por organismos de gobierno del Perú y la ONG Wildlife Conservation Society (WCS), organización que ha establecido áreas prioritarias para otras especies de vida silvestre amenazadas en el mundo, como el elefante asiático, el chimpancé y el jaguar.

Rob Wallace, quien pertenece a la filial boliviana del organismo y quien  participó activamente en el encuentro, explica que el objetivo del  trabajo, entre otros, fue “identificar los lugares que cada país considera más importante para la conservación de la especie en el futuro”, dice.

Hoy se encuentran sistematizando la información para enviar el primer borrador de las conclusiones a los participantes.



Amenazas locales

Entre los peligros a nivel nacional figuran, por ejemplo,  la intoxicación por plomo que genera una muerte silenciosa, y en el largo plazo, del animal. Este problema se ha reportado especialmente en la Patagonia, donde existe una población estimada de 100 cóndores.

Este tipo de intoxicación tiene su origen cuando el ave se come los perdigones de plomo de animales muertos por cacería, que luego contaminan su torrente sanguíneo.

En la Zona Central del país, el peligro lo representan las carroñas envenenadas para eliminar perros salvajes y el  relleno sanitario que existe en  la  localidad de Montenegro al norte de Santiago.

Víctor Escobar cuenta que esta situación es compleja, porque el vertedero se construyó “justo en una ruta de tránsito histórica de la especie, que es el cordón de Chacabuco. Ellos siempre han volado por ahí”, afirma.

Cecilia Agüero, directora de Desarrollo Corporativo de KDM, empresa dueña del relleno sanitario Lomas del Colorado, al que hace referencia Escobar, señala que a raíz de un incidente con cóndores que ingirieron desperdicios en el relleno, en 2005, se encargó un estudio que, entre otras conclusiones,  advirtió que el relleno implicaba un riesgo por la eventual ingesta de bolsas.

Tras el incidente, la empresa adoptó  medidas  para ahuyentar las aves, habilitó comederos alejados del relleno y puso en operaciones el Programa de Conservación del Cóndor Andino.

“Desde esa fecha, ha disminuido la presencia de cóndores que lleguen al frente de trabajo y no se han registrado intoxicaciones en las aves”, afirma Agüero.

En algún momento, recuerda, se utilizó la técnica de tronadura para alejarlos de la zona, pero se vio que no era efectivo. Por eso hoy cuentan con una persona que cumple con la labor de espantarlos y se está evaluando la incorporación de un perro amaestrado.

Los comederos no sólo buscan evitar que coman de la basura, sino que también tienen el fin de proveerles de alimentación entre julio y diciembre de cada año, período en que la comida escasea para estas aves.

“Durante el período de funcionamiento del comedero, pueden llegar hasta 150 cóndores diarios que se alimentan y luego vuelven a la cordillera”, concluye.

viernes, 22 de mayo de 2015

Biodiversidad Urbana

Silenciosos, escurridizos, y hasta invisibles, una rica variedad de animales comparten la ciudad, haciendo de edificios, plazas y parques su nuevo hábitat.

Para algunos, Santiago siempre fue su hábitat natural y lograron sobrevivir al crecimiento de la ciudad, los autos y el cemento. Otros llegaron a ella en busca de abrigo y comida, y se quedaron. Es la desconocida fauna que convive entre los seis millones de habitantes de la capital pero que en muchos casos sólo es advertida por ojos y oídos humanos entrenados.

Herman Núñez, curador jefe del Área Vertebrados del Museo Nacional de Historia Natural, explica que en Santiago existe un solo ecosistema: el mediterráneo con cierta degradación del mismo hacia la cordillera. El cemento de la ciudad produce calentamiento del ambiente en algunas zonas pero no por eso deja de ser mediterráneo. “Lo que sí produce es una fragmentación de los componentes del ecosistema mediterráneo compuesto por plantas y animales, que se ven aislados unos de otros, disminuyendo flujos génicos, con el consiguiente empobrecimiento de la biodiversidad genética, lo que propicia extinciones locales, no sólo de animales, sino también de plantas y suelos”, dice Núñez.

Anfibios y reptiles

Según Núñez, en el cerro San Cristóbal y Santa Lucía, sobre todo en primavera, se pueden ver lagartijas que salen a tomar sol entre las enredaderas del parque, pero son muy huidizas y cuesta verlas.

Otro visitante de temporada es el sapito de cuatro ojos (Pleurodema thaul). “En invierno, cuando llueve, las aguas que bajan de la cordillera los arrastran. Son los únicos sapos que a veces llegan a la ciudad y se pueden ver, por ejemplo, en el Zanjón de la Aguada, pero sobreviven sólo uno par de días”, explica Núñez. En otras aguas, como la laguna del Parque O’Higgins o la de la Quinta Normal se pueden ver ranas africanas que se han adaptado a estos lugares.

Sapito de cuatro ojos (Pleurodema thaul)

Sebastián Celis, veterinario de Buin Zoo, señala que en las cercanías de Colina, a veces, es posible observar a la iguana chilena, el réptil más grande del país.

Mamíferos

En Santiago existen varias colonias de murciélagos que se alimentan principalmente de polillas. También existen ratones y guarenes. Celis dice que  él mismo los ha visto en la noche caminando sobre los cables del tendido eléctrico en Las Condes.

Un poco más alejado de la ciudad, pero también conviviendo entre personas, existe un pequeño grupo de zorros culpeo (Lycalopex_culpaeus) que bajan hasta el camino a Farellones y comen lo que las personas les dejan en el camino. “Se acostumbraron ”, dice Celis.

Zorro culpeo (Lycalopex_culpaeus)


Aves

La Unión de Ornitólogos de Chile realiza constantemente seguimientos a las aves que están en la ciudad. Juan Aguirre, su director, explica que la ciudad es un buen lugar para las aves que antes acostumbraban a vivir en el campo, como las tórtolas, tencas, mirlos y raras. “Hay harto alimento, sobre todo en las comunas que tienen plazas y parques con árboles altos y frondosos. Además, los edificios altos, ayudan a que el invierno sea menos crudo para ellas”, cuenta.

La rara (Phytotoma_rara) (parecida a la loica), por ejemplo, llegó hace unos siete años a la ciudad y ha hecho de las plazas de Ñuñoa y Providencia un lugar para vivir. El mirlo, también ha aumentado su presencia y es habitual ver bandadas de 30 ó 40 individuos en los sectores aledaños a la Escuela de Carabineros, en el sector de Antonio Varas.


Las aves rapaces también hacen de la ciudad su casa, pero no  en grandes cantidades, ya que por ser especies predadoras y muy territoriales, no acostumbran a compartir su espacio con sus pares. En el edificio de la Telefónica, en pleno corazón de Santiago, por ejemplo, se sabe que una pareja de halcones peregrinos (Falco peregrinus) hizo allí su nido. También se les ha visto en edificios altos de la calle Carlos Antúnez y cerca del Pueblito de Los Dominicos.

Halcon peregrino (Falco peregrinus)

Por la noche, en el centro de Santiago, se pueden ver lechuzas. “Son más comunes de lo que la gente cree. Cazan sobre todo ratones”, señala Aguirre.

La tórtola es otra de las aves a las que le gustó Santiago. Llegó del campo hace 12 ó 15 años y se acostumbró a los humanos. Ni siquiera huye de ellos, como sí lo hacen sus primas del campo.

Juan Carlos Torres, vicepresidente de la Unión de Ornitólogos, dice que también se pueden ver cernícalos, una ave rapaz un poco más pequeña que el halcón, que caza presas vivas al amanecer y atardecer y vive en parejas. Otra rapaz habitual de la ciudad son los tiuques (Milvago chimango), pero esta es carroñera y se puede ver en las calles comiendo incluso sobre el suelo y en grupos, porque son más sociales.



Mantis religiosa

Entre los insectos, Celis cuenta que no es raro que en el verano aparezcan saltamontes, sobre todo en las casas que tienen pasto y malezas sin cortar. Con ellos aparece también la mantis religiosa porque los saltamontes son su principal alimento.



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por Cecilia Yáñez


Evolución y biodiversidad

“Las especies que sobreviven no son las más fuertes, ni las más rápidas, ni las más inteligentes; sino aquellas que se adaptan mejor al cambio.”
Charles Darwin, en El origen de las especies.


De una forma simple de vida hace 3.500 millones de años, a la gran diversidad de seres vivos hoy en día, la evolución ha tenido, y tiene, un papel importante en la expresión de la variabilidad de vida. Pero, ¿cuáles son los factores evolutivos que han favorecido su generación?

Este artículo recoge el testigo lanzado en ¿Qué es la biodiversidad?, en donde se introduce su concepto y cómo se estudia, y se adentra en la evolución como catalizador de esta.

Evolución y biodiversidad

Todo comenzó hace miles de millones de años con una forma de vida simple, un organismo procariota, unicelular y anuclear, que luchaba por su supervivencia en un mar incubante bajo una atmósfera primigenia reducida y casi carente de oxígeno.

En ese hervor primigenio, que probablemente comenzó en zonas costeras y en fosas abisales con fumarolas gigantescas plagadas de sulfuro de hidrógeno, la vida fue adaptándose a los cambios ambientales de su alrededor con pequeñas variaciones que culminarían decenas de miles de años después en la actual diversidad de seres vivos que conforman nuestro planeta.

Trasladémonos un momento a ese instante en el tiempo en que la chispa de la vida brota para poder tener una visión más global y adentrarnos en los procesos que han permitido, y siguen haciendo, la generación de biodiversidad.



Biodiversidad, microevolución y macroevolución

Como enzimas catalizando reacciones químicas, dos factores evolutivos clave fueron y son los responsables de actuar en la catalización de la biodiversidad: la microevolución y la macroevolución, sin olvidar que tanto el tiempo de evolución como la estabilidad climática son otros dos factores evolutivos influyentes en su generación, ya que inciden sobre los primeros.

Recordemos, por un momento, las diferentes clases de perros que existen: Mastín español, Terrier, Pekinés, San Bernardo, Husky siberiano, Pastor alemán, el Xoloitzcuintle… Ahora pensemos en las diferentes especies de cánidos que habitan y han habitado en el planeta, desde los lobos -y sus variedades el perro y el dingo-, pasando por los coyotes y los chacales, hasta los extintos Canis apolloniensis y Canis dirus. Lo primero se trata de un proceso de microevolución, mientras que lo segundo se trata de un proceso macroevolutivo.

Diferencias entre microevolución y macroevolución en su papel generador de biodiversidad

La microevolución es la que permite y fomenta la variabilidad genética de una especie para que pueda adaptarse mejor a los cambios ambientales y a la colonización de nuevas áreas, como pasa por ejemplo con las cepas de bacterias resistentes a los antibióticos o las diferentes clases de Canis lupus familiaris, pero es la macroevolución la que describe los sucesos de la evolución orgánica a gran escala.

Por tanto, aunque los modelos y procesos macroevolutivos surgen de los correspondientes de la microevolución, poseen cierto grado de autonomía: la aparición de nuevas adaptaciones y especies y las variables tasas de especiación (generación de nuevas especies) y extinción, que se aprecian en el registro fósil, van más allá de la fluctuación de las frecuencias alélicas de las poblaciones, logrando que las estirpes con mayores tasas de especiación y menores de extinción produzcan la mayor diversidad de formas. Los ecólogos utilizan el índice de diversidad gamma para medir los fenómenos que se dan a escalas espaciales muy amplias, que reflejan sobre todo procesos evolutivos.

En conclusión, la riqueza de formas de vida que han conformado y conforman nuestro planeta Tierra, desde las arqueobacterias y los dinosaurios hasta el ser humano, es debida a la microevolución y a la macroevolución, sin olvidarnos que el clima y el tiempo de evolución también juegan un papel importante en la generación y el grado de la diversidad de vida, o biodiversidad.



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Evolucióny biodiversidad, por Eva Bonastre


lunes, 18 de mayo de 2015

Delfín chileno (Cephalorhynchus eutropia) se estaría separando en dos poblaciones distintas

por Cristina Espinoza (La Tercera)
Estudio concluye que existen diferencias genéticas entre poblaciones de la zona central con las de zona sur.

Cephalorhynchus eutropia (Fuente CMS)

El delfín chileno (Cephalorhynchus eutropia), delfín negro o tonina es una especie endémica, poco estudiada y vulnerable. Habita entre Valparaíso y la isla Navarino (Región de Magallanes), y su clasificación de riesgo de extinción se ha hecho separando a los que viven desde la Región de Los Lagos al norte y de ahí al sur. Los primeros están vulnerables y en el sur casi amenazados.

Ahora un estudio logró determinar que esa separación no es aleatoria, sino que tienen diferencias genéticas.

María José Pérez, investigadora postdoctoral de la U. de Chile y del Centro de Investigación Eutropia (dedicada a estudiar los mamíferos marinos nativos), realizó un análisis genético a delfines de ocho localidades de la costa chilena. Su trabajo arrojó que no hay intercambio genético actual entre poblaciones y que se estarían diferenciando.

A la luz de esta información existe una población desde Puerto Montt hacia el norte y otra desde Puerto Montt hacia el sur, lo que es bastante impresionante para un delfín que tiene la capacidad móvil de cruzar el canal de Chacao y, por tanto, el quiebre poblacional no debería ser tan abrupto. Pero los resultados son reveladores, avalan una marcada estructura poblacional, formándose dos poblaciones”, dice Pérez.

Esa diferencia también se da en términos morfológicos, “es decir, podríamos pensar que cada población ya se estuviese adaptando al ambiente donde habita -diferencias en el cráneo por ejemplo-, lo que a largo plazo contribuye a la diferenciación entre ellas”, agrega la bióloga marina. “Se encontraron diferencias en  tamaño de estructuras funcionales de los cráneos entre la zona norte y la zona sur, lo que quiere decir que esto apoyaría que los delfines de cada lado se estarían adaptando a las condiciones del ambiente donde se encuentran”, asegura.

Es el primer estudio que muestra una visión integral del delfín chileno y contribuye con información necesaria para definir estrategias de conservación para la especie.

Se identifican dos unidades poblacionales para el delfín chileno, dos unidades que deben ser tratadas como independientes desde el punto de vista de conservación. Cada una debe responder a planes de manejo diseñados de acuerdo a las exigencias y características de la zona, no como una sola población”, sostiene.

Eso porque dependiendo de su ubicación tienen distintas amenazas y mientras en el norte la pesca incidental es el mayor riesgo, en el sur lo es la maricultura (cultivo de organismos marinos para productos alimenticios).

La reproducción de las Ballenas

Fotografía: Eubalaena australis (Ballena Franca Austral)
Pelancura – V Región – Chile – Ago/2013 por @FNardecchiaS

En la reproducción de las ballenas, la hembra pare una sola cría, llamada ballenato, tras un período de gestación que varía entre 9 y 16 meses, según la especie. El cachalote es la especie de ballena que tiene la gestación más larga, es decir, 16 meses. Normalmente, las ballenas tienen una cría cada 3 años. Estas crías pesan alrededor de 2 toneladas al nacer y miden entre 4 y 5 metros, dependiendo la especie. Tienen la capacidad de nadar desde el primer momento.

Las crías de las ballenas crecen muy rápido, aproximadamente 3 centímetros por día durante los primeros dos meses de vida. En parte, esto es debido a que la leche de ballena es muy nutritiva, tiene un alto porcentaje en grasa. Pasan entre siete y doce meses tomando leche de su madre. Durante estos primeros meses las crías acompañan a sus padres en los movimientos migratorios. Y están protegidos no sólo por sus padres, sino por todo el grupo. Las ballenas alcanzan la madurez sexual entre los 6 y 13 años de edad. Pueden vivir entre 20 y 60 años, lo que resulta significativamente más largo que la mayoría de otras formas de vida acuática.

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viernes, 15 de mayo de 2015

Pumas, la pérdida del equilibrio ecológico como causa de los ataques

Un ciclista fue atacado por un puma en las cercanías de Villa O'Higgins, Chile.

El pasado fin de semana, en el mismo sector, se habría producido un ataque similar a turistas a bordo de un vehículo. Chaltén Hoy agrega que desde hace muchos tiempos pobladores de Entrada Mayer y Río Bravo vienen denunciado ataques de pumas a sus rebaños.

El puma fue fotografiado el pasado fin de semana. (Foto: Nicole Vernal)

Alerta por la pérdida del equilibrio ecológico

Estos hechos, representan apenas un síntoma de la acelerada pérdida del equilibrio ecológico en la región debido a la caza indiscriminada, sobre pastoreo, introducción de especies exógenas, tala de bosques o incendios que destruyen el hábitat natural de las especies autóctonas.

La solución brutal es la caza del animal, cuando se deberían focalizar los esfuerzos de las autoridades y comunidades para restablecer el equilibrio en la zona. Recordemos que la presa natural del puma es el guanaco. En la medida que se diezme sus poblaciones o se limite su área de expansión, los pumas y otros depredadores se verán obligados a buscar fuentes alternativas de alimento.


La conducta de éste puma, referida por los testigos, nos estaría hablando de un animal en riesgo, confundido y quizás padeciendo algún tipo de enfermedad o herida. No se especifica si es hembra pero también podría ser que tenga cachorros y la escasez de presas lo esté llevando a una situación no habitual, ya que los pumas se apartan del hombre.


Aegorhinus vitulus (Caballito, Burrito, Cabrito del roble)

Orden: Coleoptera
Familia: Curculionidae

Descripción General

Estos insectos presentan la cabeza redondeada y con arcos superciliares muy desarrollados. El rostro es muy grueso y más ancho cerca de la inserción de las antenas. Pronoto con tubérculos notablemente pronunciados. Élitros paralelos, fuertemente estriados y atravesados por arrugas. Las larvas hacen galerías poco profundas, con preferencia en la base del tronco o en el cuello de la raíz.




Hábitat y rol trófico

Las larvas se alimentan de corteza y tejido leñoso vivo de los robles, horadan galerías poco profundas en la base del tronco o en el cuello de la raíz. Los adultos se alimentan de la corteza de las ramillas ocasionando heridas que pueden causar la muerte de las ramillas.

La pupación se produce en el lugar donde la larva termina su desarrollo (al interior del tronco). Se encuentra en abundancia sobre troncos de robles y coigües que presenten abundante musgo en la corteza.

Fuente
Guía de campo Insectos de Chile. (CORMA)
Raúl Briones, Francisco Gárate Flores, Viviane Jerez

Fotografías

Fernando Soto Nardecchia

miércoles, 13 de mayo de 2015

Larsen C, estudio indica que la tercera mayor plataforma de hielo antártico, podría colapsar

Estudio científico analizó 15 años de datos y determinó que existe adelgazamiento de hasta 4 metros esta masa de hielo conocida como Larsen C. El desprendimiento podría ocurrir dentro de un siglo. En los últimos 60 años, la temperatura del continente se ha elevado en hasta 2.5°C.



Entre 1995 y 2002, las plataformas de hielo Larsen A y B colapsaron y se separaron del continente antártico.  Dentro de un siglo e incluso antes podría ser el turno de Larsen C, de 50.000 kilómetros cuadrados, la tercera masa de hielo más grande del continente blanco después de la Ross y la de Ronne-Filchner.

La advertencia es parte de un estudio realizado, entre 1998 y 2002, por la British Antarctic Survey (BAS), el Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS), las universidades de Colorado y Kansas, y el instituto Scripps de Oceanografía.

Según la investigación, la plataforma perdió en promedio 4 metros de hielo, y  bajado, en promedio, un metro en la superficie, debido a la fusión de hielo en superficie y a las corrientes oceánicas cálidas en la parte inferior de la Larsen C, que es 10 veces más grande que la B (3.250 kilómetros cuadrados) y cuyo tamaño es comparable a la superficie de Escocia.

Paul Holland del BAS y autor principal del estudio explica a La Tercera que “Los cambios que estamos viendo en Larsen C están acercándonos al estado de Larsen B cuando colapsó”.

Altas temperaturas

Los análisis se realizaron mediante el uso de datos radar aerotransportado correspondientes a ocho misiones científicas  y con datos satelitales de la altura de la superficie.

“El estudio declara que hay una incerteza importante y que hay distintos valores dependiendo del sector de Larsen C y de las épocas en que se registraron las mediciones. Lo interesante es que se ha avanzado en encontrar un nuevo método para estimar la contribución de las influencias de la atmósfera y las del océano como forzantes de este fenómeno de adelgazamiento. Se debe avanzar ahora en encontrar cuáles son los mecanismos que explican cada variación dentro de la región”, señala  Ricardo Jaña del departamento Científico del Instituto Antártico Chileno (Inach).

¿Es normal este fenómeno? Jaña explica que las plataformas de hielo pierden masa en forma natural por medio de los desprendimientos de témpanos en su zona en contacto con el océano y también por el adelgazamiento del hielo que flota, pero extraordinariamente, y con alguna mayor recurrencia se ha verificado en las últimas décadas que se han producido eventos de desintegración de las plataformas (Larsen A y B), Wilkins, Wordie, Müller, en el sector de la península Antártica.

“Estos eventos se han correlacionado a impactos del cambio climático que en la zona exhibe el aumento de la temperatura del aire en unos 2.5°C a 3°C en los últimos 60 años y al aumento de la temperatura del agua del mar. Hay evidencia que la acumulación de agua sobre la superficie de las plataforma Larsen B provocó el colapso. Esa agua provino de eventos de derretimiento y el empozamiento de lagunas que potenció el agrietamiento y posterior colapso. El hielo es frágil y los esfuerzos y tensiones se propagaron abruptamente produciendo el desmembramiento”, agrega.

El glaciólogo Gino Cassasa,  cree que el adelgazamiento de la Larsen C es acelerado y que no escapa a la tendencia que ha experimentado la península Antártica.    “El retroceso y pérdida de hielo en la ha sido muy acelerado en las últimas décadas, con desintegración rápida de las plataformas, sobretodo aquellas situadas en sectores más septentrionales de la península que están más afectados por el aumento de la temperatura”, dice el investigador.

Nivel del mar

La investigación sobre la Larsen C, también aborda el impacto del derretimiento de los hielos en el nivel del mar. David Vaughan, glaciólogo y director de la Ciencia en BAS, señala que "cuando Larsen A y B se perdieron, los glaciares detrás de ellos aceleraron y ahora están contribuyendo una fracción significativa de la subida del nivel del mar de la totalidad de la Antártida”.

Dice que para el 2100 esperan que el aumento del nivel del mar en todo el mundo sea de 50 centímetros, por lo que considera importante entender el impacto que tendrá la Antártica en este fenómeno.

Cristián Rodrigo, quien estudia los ambientes glaciomarinos, es decir, aquellas áreas donde un glaciar toma contacto con el agua de mar, opina el derretimiento de la Larsen C no tendrá un impacto significativo en el nivel del mar. “No creo, ya que las plataformas de hielo descansan sobre el mar y su volumen ya es parte del sistema océano. En ocasiones existe una conexión con glaciares del continente, en ese caso, puede que dinámicamente fluyan estos glaciares al mar y luego sus desprendimientos de hielo aporten agua al océano y contribuyan al ascenso del nivel del mar”, señala este investigador de la U. Andrés Bello.

Cassasa, en tanto, estima que si se derritiera todo el hielo de los glaciares de la península antártica, el nivel global de las aguar podría ascender en cerca de 24 centímetros.

¿Qué se hacer para frenar estos fenómenos? Cristián Rodrigo, explica que “si consideramos que las actividades humanas tienen un impacto sobre el calentamiento global, habría que reducir las emisiones de CO2 y otros gases invernaderos, fomentar el uso de energías alternativas, cambiar el estilo de vida con un sentido más armonioso con el medio ambiente, entre otras”.

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martes, 12 de mayo de 2015

Saurornitholestes sullivani, un nuevo raptor con superolfato

Saurornitholestes sullivani es el nombre de esta nueva especie de dinosaurio con una apariencia similar al Velociraptor, pero que contaba con un sentido del olfato más desarrollado, lo que lo convertía en un cazador excepcional.



El descubrimiento del Saurornitholestes sullivani, difundido por un grupo de investigadores de la Universidad de Pennsylvania, sería uno de los más importantes en el ramo a fechas recientes, aunque curiosamente fue producto de un descuido cometido hace 16 años.

Steven Jasinski, estudiante de doctorado y curador del Museo Estatal de Pennsylvania, fue el encargado de dar con esta nueva especie al analizar un fósil de 75 millones de años de antigüedad, excavado en 1999 por el paleontólogo Robert Sullivan, quien en su momento clasificó erróneamente su descubrimiento, al considerarlo como parte de los huesos de una clase ya existente. Por fortuna Jasinski tuvo el acierto de estudiar a mayor detalle los restos, para percatarse de que en realidad se trataba de una especie completamente nueva, con muchas características similares a otros raptores, pero con una estructura olfatoria mucho más elaborada.

 


El estudio, publicado en la más reciente edición del New Mexico Museum of Natural History and Science Bulletin, según reporta el Daily Mail, analiza a profundidad las cualidades del cráneo del Saurornitholestes sullivani, cuyo bulbo olfatorio posee unas dimensiones más grandes de lo normal, lo que implicaría un sentido del olfato mucho más agudo que el del Velociraptor y sus demás parientes.

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domingo, 10 de mayo de 2015